El mate es una infusión muy común en Argentina, Uruguay, Paraguay y el sur de Brasil. Se toma dentro de una calabaza ahuecada que se denomina también mate. La planta de la cual se produce esta bebida es la yerba mate (ilex paraguariensis). La yerba mate se dispone en el interior de la calabaza y se le agrega agua caliente con una temperatura inferior al punto de ebullición.
Esto da lugar a una masa húmeda, verde, casi cronopial, espumosa y caliente. Generalmente se bebe utilizando una bombilla, instrumento alargado metálico y hueco mediante el cual se succiona el mate (infusión) desde el interior de la calabaza hacia la boca, desde donde el lÃquido proseguirá por cuenta propia en dirección al estómago. La bombilla presenta en el extremo que se introduce a la bebida un dispositivo que sirve de colador y permite la llegada a la boca del lÃquido, impidiendo el paso de corpúsculos sólidos. El agua caliente, no hervida, se almacena en un termo. Se vierte el agua en la calabaza hasta lograr mojar gran parte de la yerba en su interior, succionando a continuación con el fin de desalojar el lÃquido del recipiente. Usualmente se alternan las actividades del servido y succión de lÃquido aunque nada impide realizarlas simultáneamente. La actividad consistente en el vertido alternante de agua caliente se denomina cebar. Cuando hay varios mate-succionadores presentes, la responabilidad de cebar recae en uno sólo de ellos (el cual también podrá succionar en su tiempo libre). En el caso de que se trate de una sola persona, él mismo será el cebador-succionador. Si los que están tomando mate son varios, aquel quien se encarga de cebar el mate debe ubicarse en una posición estratégica. Si la disposisión espacial de los individuos toma la forma de una circunferencia o elipsoide el cebador podrá optar por sentarse en el centro y actuar de cebador-estrella, o bien puede incorporarse a la formación y desenvolverse como cebador ortodoxo. Existen varias formas alternativas de posisionarse, tanto para el cebador como para los que están librados de este oficio. Una cuestión que suscita especial interés es la de si se debe -o no- agregar azúcar al mate con el objetivo de endulzarlo. El interés en endulzarlo surge del sabor amargo que presenta la bebida original. La problemática no ha podido ser resuelto satisfactoriamente, dejándose a cargo del bebedor el confeccionar el mate según los dictados de su conciencia. |